Enterate que premios forjaron a Frutika a lo largo de su historia

Cada empresa busca desarrollar la excelencia tanto en sus productos como en su gestión como empresa. Hoy te contamos los pilares de Frutika y los reconocimientos que la forjaron.

Los primeros tiempos

Iniciando su sueño en 1978, Heinfried Wolfgang Kress acompañado de su esposa Beate, decide dedicar su vida a trabajar en Paraguay. Viéndola como una tierra llena de oportunidades y convirtiéndose también en uno de los principales nexos para la venida de inversionistas extranjeros a nuestro país.

Con liderazgo y una visión bien clara en su forma de trabajo, se destacó con mucho esfuerzo en el rubro agrícola. Para luego reinvertir totalmente en el país, con la compra de más tierras y la diversificación en cultivos cítricos, aprovechando de esta manera la riqueza que caracteriza a la tierra de la zona norte del Departamento de ltapúa.

Reconocimiento

En menos de 20 años Heinfried W. Kress es premiado por la Asociación de Empresarios Cristianos (ADEC) como “Empresario del año 1996” gracias a su trabajo, visión, dedicación y gestión. Sus valores y principios hacia el trabajo y la familia, lo llevaron a ganarse ese reconocimiento.

Siguiendo los pasos

Tras la triste partida de su esposo Heinfried, el desafío ahora estaba en manos de Beate Kress, quien con una tremenda valentía decidió continuar el sueño y todos los proyectos laborales de su esposo. Con firmeza pudo sobrellevar muchos obstáculos y alcanzar el éxito con Frutika. Pasaron 7 años para que ella también logre ser premiada con el mismo galardón: “Empresaria del año 2003” de los Premios ADEC.