5 razones para pasar más tiempo al aire libre
Es necesario tener un escape del ritmo en que trabajamos y vivimos, nuestro estilo de vida actual, invadido por la tecnología a veces puede generar hábitos no tan saludables. Para experimentar los beneficios de pasar un tiempo al aire libre, es clave desconectarse y tener un momento de relax.
Alivia el estrés
Tener un momento outdoor te puede ayudar a liberar las tensiones del trabajo o la facultad. La tensión muchas veces puede alterar una mente sana y el sistema inmunológico. La tensión o estrés, se asocian con depresión, obesidad e hipertensión. Pasar tiempo en la naturaleza ayuda a crear un ambiente más distendido en jóvenes y adultos. Los niveles en el torrente sanguíneo de cortisol, la hormona de la tensión, se reducen después de haber pasado tiempo al aire libre.
Fortalece el sistema inmunológico
Según estudios, permanecer demasiado tiempo entre 4 paredes puede ocasionar un efecto negativo en tu salud inmunológica. El cuerpo se acostumbra a estar en un ambiente controlado y baja sus defensas.
Dosis sanas de naturaleza le ayudarán a preparar su cuerpo para que se fortalezca, al estar fuera de un ambiente cerrado, el cuerpo aumenta el número de leucocitos en la sangre. Es como el efecto de una vacuna. El refuerzo en la inmunidad logrado por un viaje en la naturaleza puede ayudarle a sentirse saludable.
Dieta más sana
Pasar tiempo en el campo o alejado de la ciudad es sinónimo de evitar las comidas rápidas. Va de la mano con un estilo de vida más saludable. Podemos incluso por un par de horas tener un picnic en un parque o un viaje de fin de semana. Lo importante es evitar alimentos que tengan conservantes o alto nivel de sodio y azúcares.
Mejora la memoria
Pasar tiempo fuera de la ciudad ayuda a la memoria de corto plazo. En la Universidad de Michigan, un experimento respaldó esta teoría, a dos grupos de jóvenes estudiantes se les hizo una prueba de memoria y luego se les pidió que hagan una caminata por el jardín o en una calle de la ciudad. Después de hacerlas, los participantes volvieron a hacer una prueba de memoria. Aquéllos que caminaron en el jardín mejoraron sus calificaciones en un 20%, no se vio una mejora en los participantes que lo hicieron por la ciudad. Los paisajes naturales y las vistas de jardines tranquilizan nuestra mente y nos ayudan a enfocarnos mejor.
Aumenta la longevidad
En el 2015 se hizo un estudio sobre 108.630 mujeres estadounidenses para establecer la conexión entre naturaleza y longevidad. Las mujeres que vivían cerca de parques, jardines, árboles y bosques tenían una tasa de mortalidad mucho más baja que las que vivían lejos de la naturaleza.
Los factores se deben a la calidad del aire, el cual es mejor en áreas caracterizadas por una vegetación más densa, también estar cerca de parques y senderos naturales puede promover el ejercicio más frecuente, ayudando a mantener la salud cardíaca. El tiempo que las personas pasan en exteriores promueve las relaciones sociales y puede mejorar la salud mental.